Antes perseguía el delito y ahora defiende a presuntos delincuentes.
Recientemente, un terrible delito se habría suscitado en Cusco, pues un oficial de la Policía fue acusado de ultrajar a una suboficial de 24 años que se encontraba en condición vulnerable; sin embargo, más que el propio caso, ha causado mucha sorpresa que Eduardo Poblete sea el abogado defensor del imputado de tan abominable delito. Así consta en el Acta de Registro de Audiencia Pública de Prisión Preventiva que fue emitida por el Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria de la Corte Superior de Justicia del Cusco el pasado 10 de julio, cuando el exfiscal se presentó como flamante jurisconsulto particular.
LAMENTABLE. Poblete fue fiscal de Prevención del Delito hasta el pasado 24 de junio. El mediático exfiscal se vio obligado a renunciar, luego de estar envuelto en un escándalo, pues el Diario El Tiempo de Cusco del grupo Qosqo Times, informó que el sobrino del abogado, el empresario Marco Echegaray Barberis era propietario de la discoteca ‘Maia’, lugar que nunca había sido cerrado ni intervenido por el exfiscal. La presidenta de la Junta de Fiscales cambió a Eduardo Poblete a otra fiscalía. Esta rotación fue asumida como una ‘humillación’ por Poblete, quien de forma inmediata renunció al Ministerio Público.
Cuando Poblete anunció su renuncia, advirtió: “Si me conocieron como fiscal, imagínense lo qué podría hacer como abogado”.
Tal vez, en los próximos días, no sea raro que el mediático e histriónico perseguidor de delincuentes, sea visto en las audiencias defendiendo a acusados por extorsión, sicariato o tal vez, a los dueños de las discotecas ilegales, pues Poblete conoce bien el funcionamiento de las fiscalías cusqueñas.