EL SEÑOR DE LOS TEMBLORES, EL TAYTACHA DE TODOS LOS CUSQUEÑOS, DERRAMA SU BENDICIÓN EN ESTE LUNES SANTO

Con renovadas medidas de seguridad y también de resguardo, el Señor de Los Temblores sale en su recorrido 2024 por las calles del Centro Histórico de Cusco.

Todos los Lunes Santo en Cus­co sale en procesión el Señor de Los Temblores, llamado cariño­samente por sus devotos como el ‘Tayatcha’, patrón jurado de la Ciudad Imperial. Su imagen re­corre las principales calles del centro de la ciudad, mientras miles de personas lo siguen de cerca, rezándole a fin de obte­ner su protección o hasta algún milagro.

Este año se darán cita a este acto litúrgico cerca de 250 mil personas, provenientes de toda la región Cusco, regiones con­tiguas y hasta países vecinos como Bolivia y Chile.

La advocación de este Cristo crucificado fue elaborada en el Siglo XVII por artesanos cus­queños, quienes le dieron un perfil más meztizo a la imagen.

Desde entonces es venerada en Cusco y más aún, cuando en 1720 fue sacado en procesión y la historia cuenta que calmó el terremoto que se suscitaba en ese entonces, en ese momento se le cambió el nombre de Cristo de La Buena Muerte por el del Señor de Los Temblores.

ALEGRÍA. En medio de un am­biente de fiesta y devoción, los creyentes católicos celebran la procesión del Señor de Los Temblores en Cusco, cuya ima­gen saldrá en andas la tarde del lunes 25 de marzo.

Como cada Lunes Santo, la ima­gen del Señor de Los Temblo­res, conocido también como el ‘Taytacha’ de Los Temblores, sale en procesión en Cusco, constituyéndose como uno de los actos principales, y más es­perados por toda la feligresía en Cusco.

Esta vez, las autoridades deci­dieron que la imagen dé cuatro bendiciones, la primera de ellas a las 14:00 horas en el atrio de la Catedral de Cusco, dirigida a los feligreses más ancianos y menores de edad, a fin de no exponerlos al tumulto y gentío que se genera por la tarde. Es así que, según la programación lanzada por el Arzobispado de Cusco, desde las 06:00 horas de este Lunes Santo, en la Catedral iniciará una serie de seis misas de comunión hasta el medio día, posteriormente a las 13:45 se llevará a cabo una homilía a cargo del arzobispo de Cusco, y a las 14:00 horas iniciará la pro­cesión con una bendición.

El anda transitará por las prin­cipales vías del Centro Histó­rico de Cusco, impartiendo bendiciones en La Merced, San Francisco y de nuevo en la Pla­za Mayor de Cusco, la ceremo­nia concluirá aproximadamen­te a las 19:00 horas.

Las autoridades de Cusco, jun­tamente a la Policía, Bomberos, sector Salud y otros, generaron un plan de contingencia y reac­ción frente a cualquier incon­veniente que se presente en la procesión. Se calcula que unas 250 mil personas asistieron a este acto litúrgico.

LA HISTORIA. El 31 de mayo de 1650 ocurrió en el Cusco un fuerte terremoto que atemorizó a los pobladores de la ciudad. Como un acto de fe, sacaron en procesión a la imagen del Cristo de la Buena Muerte y lograron que la tierra deje de temblar. Así lo reseña David Ugarte Vega en el libro Tesoros de la Catedral de Cusco.

A partir de este hecho, la ima­gen —que recibió el nombre del Señor de los Temblores o Taytacha de los Temblores— saldría en procesión cada 31 de marzo. Desde 1741, esta imagen, que luego sería estudiada y se sabría que fue elaborada en el Cusco, se venera los lunes san­tos, es decir, al inicio de la Se­mana Santa.

Años más tarde, en 1928, el ar­zobispo del Perú, Mons. Federi­co Pascual Farfán instauró un segundo día en el año para ren­dirle homenaje al Señor de los Temblores. Esta segunda fecha fue designada el último domin­go de octubre, día reconocido por la Iglesia Católica como la fiesta de Cristo Rey.

Si bien la fiesta de Cristo Rey no arraigaría en la feligresía de­vota del Taytacha tanto como el Lunes Santo, la fe en el Señor de los Temblores creció mucho. Prueba de ello, fue cuando el Instituto Nacional de Cultura (INC) de esta ciudad restauró la venerada imagen en enero del 2005.

Después de 355 años, la ima­gen del Cristo de los Temblo­res abandonaría el centro de la ciudad. Para que la feligresía entendiera y acompañara esta necesaria intervención, el ar­zobispo de Cusco, Mons. Juan Antonio Ugarte, dijo que el Taytacha de los Temblores esta ‘enfermo’ y debe ser ‘curado’.

Según Ugarte Vega, el Taytacha debía ser internado en el Centro de Restauración del INC para un tratamiento técnico por los graves daños en la estructura de la imagen. Y señaló que se encontraron 60 cartas dentro del tórax de la imagen, introdu­cidas por la herida del costado. La carta más antigua data de 1782.

En el libro, Ugarte Vega también explica que la venerada imagen une dos estilos muy marcados como el indígena y el español y que fue elaborada en el Cusco con la técnica taucca, que em­plea materiales de la zona como el maguey, madera balsa y fibra de lino.

Después de cuatro semanas, el 12 de marzo de 2005, la imagen restaurada retornó a la Cate­dral. Antes pasó por diversas localidades como Oropesa, Ti­pón y Saylla donde los poblado­res “le pedían a gritos milagros y bendiciones”. Los fieles de es­tos lugares, así como los presos del penal de Quenocoro, salie­ron a darle el encuentro.

Como muestra de su fe, realiza­ron danzas típicas, alfombras de flores y lanzaron pétalos de ñucchu (flores de intenso color carmesí asociado al culto de los incas). Alcaldes de algunas lo­calidades ofrecieron discursos. Todo en coordinación con las hermandades y cofradías reli­giosas del Taytacha de los Tem­blores.

La profunda devoción al Señor de los Temblores en el Cusco es solo una muestra de la fe viva que existe en esta importante ciudad. Otras festividades em­blemáticas celebradas en nues­tra sierra peruana es la fiesta del Corpus Christi. Desde 1550 se celebra el Corpus Christi, 15 días después de la fundación española del Cusco.