El representante de la Fartac Cusco, Walter Torres, confirmó que en el pasado mes de enero un grupo de manifestantes de hasta 400 personas, procedentes de Acomayo, Canchis, Canas, Quispicanchi, y otras jurisdicciones ingresaron y se alojaron en el estadio Inca Garcilaso de la Vega. El dirigente señaló que se llevaron frazadas para dormir, y negó que se hubieran consumido bebidas alcohólicas durante la estadía.
Como se recuerda, el hecho fue alertado inicialmente por el fiscal de Prevención del Delito, Eduardo Poblete, quien calificó el uso del estadio como un caso de peculado de uso. Posteriormente la Contraloría confirmó mediante un informe de control con imágenes y documentos la denuncia.
Al respecto, el representante de los agricultores de Cusco, señaló que solo recibieron un “apoyo humanitario”, y posterior a ello los manifestantes que llegaban desde provincias a Cusco pernoctaron en las vías públicas. Torres señaló que ha sido denunciado por presuntamente atentar contra la vida y la salud de las personas, aunque sus denunciantes todavía no se han presentado cuando se les ha citado, razón por la cual considera dichos actos como una forma de intimidación y represión a la protesta que las organizaciones realizaron.