‘Las flores desconocidas’ y el poeta de las causas justas
Artista se reinventa para su segunda entrega, cargada de fuertes emociones y prosa descollante
Javier Quiroz (Machupicchu, 1989), tras algunas etapas emocionalmente devastadoras, se atrevió a transformar sus miedos y traumas en versos que reinventa constantemente en su poética. Convencido que las artes son capaces de salvar el futuro de las personas y una forma de salir de pesimismo.
Licenciado en Ciencias de la Comunicación y maestrista en Gerencia Social, Quiroz es un escritor principalmente de poesía, también escribe relatos y cuentos, reparte su tiempo entre diversos proyectos: acaba de publicar su segundo poemario titulado El laberinto de las flores desconocidas y ha iniciado la recopilación de a tradición oral del pueblo de Machupichu y comunidades, proyectándose a publicar un libro de cuentos y relatos en los próximos años.
E. T: ¿PODRÍA CONTARNOS UN POCO DE SU VIDA Y ACTIVIDAD LITERARIA?
E. Q: Trabajo en diferentes proyectos de comunicación y de proyección social, principalmente de poesía. Escribo desde los 11 años y es uno de mis pasatiempos preferidos. Mi primer libro de poesía, Poétrica fue publicado y presentado en setiembre de 2018, luego de cuatro años, habiendo enfrentado una cruda pandemia que azotó a medio mundo, publiqué en 2022 mi segundo poemario El laberinto de las flores desconocidas. Ahora vengo organizando un reciente proyecto que trata de revalorar el imaginario colectivo y la tradición oral del distrito de Machupichu, una iniciativa que de seguro permitirá aportar con la memora social de este importarte distrito. Me defino como un artista que le encantan los retos y se reinventa a cada momento.
¿CUÁLES FUERON SUS PRIMERAS LECTURAS POÉTICAS Y QUÉ AUTORES LE INFLUYERON?
Cesar Vallejo, Pablo Neruda, Heraud y Benedetti, y los de otros poetas como Gustavo Pérez Ocampo y Mariano Melgar. Poco a poco, se abrió la puerta y entraron a mi vida los poetas mayores como Cesar Calvo, José Watanabe, Verástegui y Wáshington Delgado, debo manifestar que Perú no tiene nada que envidiar a otros países en cultura poética, nosotros tenemos muy grandes y buenos poetas, pero tradicionalmente pude adentrarme en la lectura de poetas franceses como Baudelaire, Rimbaud, Verlaine y los norteamericanos como Emily Dickinson y Walt Whitman. De esas primeras lecturas nació mi primera poesía; poesía que ha evolucionado con el tiempo gracias a la continua lectura de otros poetas, sobre todo latinoamericanos como Fina García y Roberto Bolaño.
¿CÓMO DEFINIRÍA A SU POESÍA?
Vanguardista y experimental, creo que es una poesía descriptiva, crítica y en partes simbolista y expresiva, con un aire más bien social, romántico y cotidiano, muy esperanzador. Trato de cuidar mucho la prosa poética, la rima, la forma, el ritmo y la métrica, pero de forma espontánea y no forzada.
¿CREE QUE EL POETA ‘EVOLUCIONA’ EN SU ESCRITURA? ¿CÓMO HA CAMBIADO SU LENGUAJE POÉTICO A LO LARGO DE LOS AÑOS?
Es una necesidad evolucionar en poesía, eso significa adaptarse y reinventarse en cada momento, de hecho, que tiene que ver mucho con la madurez literaria, yo puedo percibir eso en mi primer poemario Poétrica y lo que después de cuatro años vuelvo a publicar a través de El laberinto de las flores desconocidas, en este último libro encuentro a un poeta con más lectura y aprendizajes, capaz de haber experimentado nuevas formas en la poética, por lo que es imposible que nos mantengamos estáticos.
¿CUÁL ES EL FIN QUE LE GUSTARÍA LOGRAR CON SU POÉTICA?
Universalmente, el fin de todas las artes, incluido la poesía, es eminentemente social y no lucrativa, por ese camino vamos adentrándonos a este mundo de la literatura, de hecho, que lo económico viene como consecuencia de nuestra constancia, pero eso es secundario, a más de ello, lo que yo quiero lograr con mi arte es trascender, eso significa que mi creación literaria permita motivar a los nuevos valores, además de ser capaz de educar y fortalecer nuestra identidad.
¿QUÉ LIBRO ESTÁ LEYENDO EN LA ACTUALIDAD?
Por ahora estoy leyendo libros de autores peruanos. Como lo decía al inicio, nuestro país, es muy rico y grande en poesía; contamos con un vasto abanico de poetas que han trascendido a nivel mundial como Antonio Cisneros y Enrique Verástegui, aunque son de diferentes escuelas, estilos y tiempos, solo para citar algunos de los que ahora me nutro, también me he atrevido a leer poetas alemanes y rusos contemporáneos, como Michael Krüger y Joseph Brodsky, por ahora en formato digital.
¿QUÉ CONSEJOS LE DARÍA A UN JOVEN ESCRITOR QUE SE INICIA EN ESTE CAMINO DE LA POESÍA?
A pesar que cada poeta o escritor es único, existe un consejo universal incuestionable: leer y escribir constantemente, a ello se suman los nuevos medios alternativos de publicación de las redes sociales, los nuevos valores deben aprovecharlas para mostrar lo que piensan, sienten y creen, en este caso, a través de la poesía, me parece algo genial, como es que algunos escritores ya están inmersos en este mundo digital interactivo, aquí les permite fidelizar e interactuar con sus lectores.
FINALMENTE, CUÉNTENOS ACERCA DE SU ÚLTIMO LIBRO
Lo que he intentado trasladar a través de este libro son mis sentimiento y estado emocional en cada momento, sobre todo durante la dura pandemia que nos costó afrontar. Después de cuatro largos años de inspiración, lectura y experiencias vividas he podido sistematizar en este libro tres capítulos que tratan de aproximarse a una búsqueda y cuestionamiento constante de la existencia humana desde las vivencias mas complejas hasta las más sencillas. El primer capítulo muestro una poesía nacida de la propia naturaleza de ser, cual es la apreciación de la belleza, la pasión y el amor.